Cocinar carne es un hábito que ha evolucionado con el ser humano a lo largo de millones de años. Gracias a ello hoy podemos disfrutar de platos deliciosos que con estos 5 consejos infalibles será perfectos
Nuestros antepasados no solían cocinar carne, por lo que era consumida cruda. A día de hoy tenemos la certeza de que nuestro sistema tolera mejor la carne cocinada. Es por ello que a lo largo de la evolución de nuestra especie, la cocina ha experimentado un desarrollo exponencial.
A veces, corremos el riesgo de perder gran parte de las propiedades de los alimentos debido a errores que cometemos al cocinarlos. Aunque esto es un peligro extensible a todo tipo de comidas, en la carne tiene más importancia todavía, ya que, además de no dejarnos apreciar el verdadero sabor, estaremos desperdiciando gran parte de sus beneficios para la salud.
Cocinar la carne correctamente
Con estos 5 consejos tendrás la clave para aprovechar al 100% todos los nutrientes y disfrutar de todo su sabor
1
La Cocción
El primer consejo que tenemos que darte es sobre la importancia diferenciar la cocción de cada tipo de carne. Como norma general, debemos separar las carnes musculadas, las cuales requerirán baja temperatura y mucha cocción. Por el contrario, las carnes magras necesitan mucha temperatura y poca cocción, lo que generalmente conocemos como un vuelta y vuelta.
2
El Punto de Sal
La sal puede ser el mejor aliado y el peor enemigo de los amantes de la carne. En su justa medida, según qué tipo de carne estemos cocinando, tiene la capacidad de resaltar los matices del plato. Sin embargo, si nos pasamos con ella puede estropear por completo su sabor. Es por esto que hay que establecer algunas normas a la hora de emplearla.
Guiarte por las proporciones es la mejor solución. Si la pieza es gruesa, necesitarás una cantidad abundante de sal para que esta llegue a penetrar en su interior, mientras que en las piezas finas te bastará con unos pocos granos. Eso sí, nunca añadiremos la sal antes de que la carne esté cerrada o marcada y siempre es mejor poner el mínimo. Si al final detectamos falta de sal podemos añadirla sin problema.
3
¿Aceite o Mantequilla?
Al cocinar carne a la parrilla o a la plancha siempre necesitamos echar mano de Aceite de Oliva o mantequilla. Esta diferencia es sobretodo geográfica, ya que mientras en el sur de Europa es casi imprescindible el Aceite de Oliva para estos casos, en el norte de Europa suele usarse más la mantequilla. Nuestro consejo es apostar por un Aceite de Oliva Virgen Extra, ya que la mantequilla añade demasiada grasa innecesaria al plato y modifica los matices de la carne. Eso sí, con una cucharadita es suficiente.
4
Precalentar la superficie
Hay quienes se han habituado a colocar la pieza de la carne sobre la superficie en frío, pero esto perjudica gravemente el proceso de cocción y la creación de la primera capa.
Para evitar esto, siempre debemos precalentar el horno o la sartén antes de colocar la pieza. De esta manera, conseguiremos una carne mucho más jugosa.
5
Al punto
En cuestiones gastronómicas, hay todo tipo de gustos. Por ello, hay quienes prefieren la carne muy hecha, pero lo cierto es que no es lo más apropiado. Cocinando demasiado la carne perderemos gran parte de sus propiedades.
Evita pasarte con la cocción. Bastará con marcar los lados en el primer contacto con la sartén previamente caliente, después bajaremos el fuego y dejaremos 5 minutos por cada lado en caso de piezas de grosor media. Con esto conseguiremos, un mayor grado de ternura y un sabor excelente.
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